Sistemas de supresión: agua nebulizada, espuma y gases inertes

Los sistemas de supresión de incendios no se limitan a los rociadores convencionales; existen tecnologías que emplean agentes distintos del agua para combatir incendios específicos. Seleccionar el método adecuado puede evitar daños colaterales y asegurar la continuidad de su negocio. A continuación presentamos una comparativa entre agua nebulizada, espuma de expansión y gases inertes para ayudarle a elegir la solución más adecuada.

Agua nebulizada

Los sistemas de agua nebulizada pulverizan el agua en microgotas que enfrían el fuego y desplazan el oxígeno. Este agente resulta muy eficiente para proteger equipamientos sensibles como salas de servidores, museos o generadores, ya que la fina niebla reduce el consumo de agua y minimiza los daños por inundación. Además, el agua nebulizada es un recurso limpio y de rápida recarga, ideal para entornos donde se debe restablecer la operación con rapidez. Para complementarlo se requiere una bomba de alta presión y un sistema de detección y alarma confiable (detección y alarma) que active la descarga de manera oportuna.

Espuma de expansión

El espumógeno se utiliza para incendios de hidrocarburos y líquidos inflamables. La relación de expansión determina su aplicación:

  • Espuma de baja expansión (ratio < 20): forma una manta densa que cubre la superficie del combustible, corta el suministro de oxígeno y ofrece buena capacidad de enfriamiento. Es ideal para tanques de almacenamiento y áreas industriales con combustibles líquidos.
  • Espuma de media expansión (ratio 20–200): se usa en superficies pequeñas como derrames de solventes o accidentes de tráfico. Genera rápidamente una espuma aislante que enfría y sofoca el fuego.
  • Espuma de alta expansión (ratio ≥ 200): genera grandes volúmenes de espuma con poco agente y se emplea en espacios cerrados como hangares, almacenes o bodegas, donde el objetivo es inundar el volumen para sofocar el incendio.

La elección del tipo de espuma debe basarse en el riesgo a proteger y en la disponibilidad de agua y equipos especializados.

Gases inertes

Los sistemas de gases inertes utilizan mezclas de argón y nitrógeno, gases naturales que no reaccionan con otros materiales. Al descargarse, reducen la concentración de oxígeno en la sala hasta un nivel que impide la combustión, pero que sigue siendo seguro para las personas. Estos sistemas ofrecen varias ventajas: no dejan residuos ni provocan daños por humedad, no conducen electricidad, tienen cero potencial de agotamiento de la capa de ozono y son adecuados para salas ocupadas. Además, la descarga es uniforme y controlada, completando el vaciado en menos de un minuto. Se emplean en centros de datos, archivos, laboratorios y salas eléctricas, donde la limpieza y la continuidad operativa son esenciales.

Ventajas y selección del sistema

Cada agente tiene puntos fuertes y limitaciones. El agua nebulizada ofrece protección eficaz con daño mínimo y es apta para espacios sensibles, pero requiere bombas de alta presión (bombas) y tuberías especializadas. La espuma de expansión es la preferida para incendios de líquidos inflamables y se integra con sistemas de tanques y mangueras (supresión), pero genera residuo que se debe limpiar. Los gases inertes son seguros, limpios y ecológicos, aunque requieren recipientes de almacenamiento y cálculo preciso de ventilación.

Conclusión

La selección de un sistema de supresión debe considerar el tipo de riesgo, la infraestructura y el valor de los activos a proteger. En Kainos Panamá ofrecemos asesoría y equipos certificados para cada aplicación, desde sistemas de supresión y bombas hasta soluciones de detección y alarma. Contáctenos para diseñar una estrategia integral que cumpla con las normativas NFPA y garantice la seguridad de sus instalaciones.